Ingredientes para 4 personas:
- 500 gramos de anguilas
- 250 g. de tomates pelados
- media cebolla blanca
- un diente de ajo
- 10 aceitunas deshuesadas
- 20 alcaparras a la sal
- 2 chiles
- medio vaso de vino blanco
- aceite de oliva virgen extra
- sal
Preparación:
Con esta receta prepararás una sabrosa versión de anguila aliñada con una salsa de aceitunas y alcaparras. Compra anguilas frescas de un tamaño de unos 400 o 500 gramos. Comience a preparar los ingredientes para la salsa deshuesando cuidadosamente las aceitunas, usando una herramienta especial o un cuchillo con un poco de paciencia. Luego corta las aceitunas en trozos del tamaño que prefieras. Picamos también la cebolla, la guindilla a la que le quitamos las pepitas y el ajo.
En cuanto a las alcaparras saladas, es importante elegirlas de buena calidad y dejar unas 20 en el agua durante 10 minutos para que se disuelva el exceso de sal. Luego, enjuáguelos bien con agua corriente y colóquelos sobre un paño de cocina para que se sequen.
Luego prepare los tomates pelados, píquelos finamente a mano sin mezclarlos. Cortar la anguila en trozos de 5 cm después de haberla eviscerado y limpiado con cuidado. Tenga cuidado al limpiar las entrañas para no dañar la hiel. Retire la cabeza y la cola.
En una cacerola grande con tapa, dorar la cebolla, la guindilla, las aceitunas deshuesadas y las alcaparras cortadas en trocitos pequeños. Cuando la cebolla esté dorada, añadir el ajo, sofreír unos segundos más, licuando con el vino blanco. Verter los tomates pelados y llevar a ebullición. Sazone con sal, teniendo en cuenta el sabor de las alcaparras. Revuelva con una cuchara de madera y cocine a fuego lento durante unos 10 minutos. Añadimos medio vaso de vino blanco y volvemos a llevar a ebullición, a continuación añadimos los trozos de anguila y cocinamos durante unos 5 minutos, con la tapa puesta y manteniendo la carne firme.
Apague el fuego y mantenga la cacerola cerrada con la tapa durante al menos una hora para completar la cocción, deje que la carne de anguila se sazone y permita que los sabores penetren bien.
Servir el plato aún caliente, acompañado de rebanadas de pan casero tostado y un vino blanco seco. Recomendamos un Romagna Albana en honor a Romagna, un lugar de tradición para la mejora culinaria de las anguilas, pero también un buen Nuragus di Cagliari para realzar los sabores salados del plato.
¡Disfrute de su comida!